Recuerdo esos gloriosos años desde el año 2000 en adelante donde había mucha presencia argentina en los torneos de polvo de ladrillo y que también solía tener muy buenos resultados en otras superficies.
Recuerdo esa época donde la recorrida periodística por cada torneo ATP siempre venía con la expectativa de algún nombre llegando a instancias finales en casi todas las semanas y mucho más cuando comenzaba esta etapa de polvo de ladrillo que culminaba en Roland Garros con más de uno de nosotros en la segunda semana y hasta tuvimos un campeón.
Y ahora? No hay recambio? se fueron retirando todos ellos: Coria, Calleri, Gaudio, Puerta, Zabaleta y otros más y atrás es muy difícil empatar semejantes nombres en calidad y cantidad. Tenemos mucho tiempo para disfrutar de Del Potro y tampoco me olvido de Monaco, Mayer, Zeballos y Schwank que tienen muchos años mas para dar y esperemos ver buenas cosas de Nalbandian todavía.
No hay que ser injustos con el tenis nacional, primero hay que valorar lo gloriosa que fue esa etapa y si bien es algo preocupante no tener el recambio a futuro que queremos todos, hay que admitir que es muy difícil volver a tener una camada de 13 jugadores top 100 y 5 top 10
como hemos tenido en alguna ocasión.
A veces me pregunto el porqué de aquella camada y creo que hubieron muchas cosas que se dieron y que quiero compartir y me tengo que ir bastante mas atrás en el tiempo.
Cuando yo era chico, para clasificar a un torneo nacional había que primero jugar el provincial, en mi caso en Misiones los primero 6 clasificaban al zonal, eramos la zona 5 que abarcaba las provincias de Misiones, Corrientes, Chaco y Formosa. Y así todo el país estaba dividido por zonas incluyendo a la Metropolitana. Solo los semifinalistas del zonal clasificaban al nacional y llegar a jugar ese torneo para mi era una gloria total, era muy competitiva y realmente había que jugar muy bien para estar ahí. Los primeros del ranking nacional obviamente eran los mejores del país y quienes clasificaban después a los torneos internacionales.
Cuando yo tenía 14 años jugaba contra Coria, Nalbandian, Acasuso y compañía y en 18 jugaban Zabaleta, Gaudio, Puerta y otros nombres mas. La competencia era muy intensa, sana y eran siempre los mejores los que llegaban a instancias finales. Esa competencia ayudaba a crecer a todos los chicos tenistas y nosotros los mas chicos estabamos ahí pendientes de los mas grandes, mirando y aprendiendo.
Esa misma sana rivalidad después llegó al plano profesional donde uno llegaba y el otro veía que se podía y así fuimos todos creciendo y llegando a lugares quizás impensados.
Si a eso le sumamos la crisis que tuvimos a fines de los 90 donde el jugador medio argentino no tenía un mango y aprendió que podía ganarse la vida jugando al tenis, todos pasamos a ser verdaderos luchadores dentro de la cancha donde en todo el mundo se sabía que jugar contra un argentino significaba un partido muy duro.
Me pongo en contacto con Guille Coria y le pregunto que recuerdo tiene de esa época y que me de su opinión y él coincide totalmente: "era lo más ir con tu delegación en un colectivo todos juntos a jugar el nacional. Nuestro nivel era muy parejo y salían partidos espectaculares. Hoy estamos intentando junto a algunos ex tenistas como Mariano Hood y Agustín Calleri mas otros referentes del tenis de chicos volver a las competencias de antes con provinciales, zonales y nacionales"
Por alguna razón todo ese sistema de torneos se cambió hace mas de 10 años por un sistema de torneos grados 1, 2 y 3 en todo el país donde todos suman puntos para un ranking único nacional y los chicos empezaron a viajar a cualquier rincón del país a jugar un grado 3 para sumar puntos y contarle a sus amigos que es top 50 del país. La posibilidad de jugar el nacional de tenis como algo único se terminó y tener un buen ranking hoy es una cuestión casi estratégica de elección de torneos y en mi opinión se perdieron muchas cosas de la competencia en los chicos.
Chucho Acasuso también me ayuda a pensar "con el viejo sistema había un solo nacional con los mejores 32 que clasificaban, hoy se puede especular y evitar jugar contra los mejores"
Este nuevo sistema provocó algun desinterés en los chicos por luchar para mejorar en el ranking de menores y veo una cantidad incontable de jugadores que quieren ser profesionales y quemando etapas juegan torneos profesionales a los 16 o 17 años que reparten 5000 pesos y se juegan todas las semanas en Buenos Aires y de calidad de tenis tenemos muy poquito, sin negar obviamente que la carrera de cada jugador es personal y el crecimiento del jugador depende mayormente del esfuerzo que ponga cada uno cosa que tampoco es el mejor, las cosas no llegan de arriba, el camino es largo y muy duro. Los chicos de hoy no ven ni vieron el esfuerzo que hizo cada "legionario" por llegar donde llegó. No se llega a estar entre los mejores jugadores del mundo por obra y arte del viento a favor ni apretando click en un mouse.
Yo sinceramente veo muy lejos la posibilidad de que tengamos una similar legión argentina como la que ya pasó, disculpen mi pesimismo pero seguramente necesitaremos tiempo y un buen trabajo a largo plazo para aprovechar con calidad de trabajo la cantidad de chicos que se volcaron al tenis en estos últimos años.